7.2.07

La Locura y La Obra




Imágenes : de M.C. Escher
La locura es absoluta ruptura de la obra , forma el momento constitutivo de una abolición , dibuja el borde exterior , la línea de derrumbe .
Una obra que se sumerge en el mundo , revela su falta de sentido , se transfigura bajo los rasgos de lo patológico , en el fondo arrastra tras ella el tiempo del mundo . Pero si a la obra la irrumpe la locura , esta abre un vacío , un tiempo de silencio , una pregunta sin respuesta , y provoca un desgarramiento sin reconciliación , que obliga al mundo a interrogarse , y así interrogado por ella lo obliga a ordenarse en su lenguaje , señalado por ella para una tarea de reconocimiento .
No hay locura sino en el último instante de la obra , pues ésta la rechaza indefinidamente a sus confines ; allí donde hay obra , no hay locura , y sin embargo , la locura es contemporánea de la obra , puesto que inaugura el tiempo de su verdad ....
La locura es soledad en la obra , pero parece que también es exhibición de la obra , el loco sabe de su impostura ante la razón , y por ello impone una postura ; los estereotipados en ella sólo ven la exhibición , y aplauden o abuchean de acuerdo a como el loco los sacó de sus sensateces . Creen que el loco es un payaso , un "snob"... , pero no ven que este personaje de lo único que se vale para "hacer reir" , es de exaltar las razones , de llevar a extremos la cordura ....
¡ Qué ironía la del payaso riéndose de sus espectadores .......! .

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